Luis XVI de Francia (en francés Louis XVI) (
Versalles,
23 de agosto de
1754 –
París,
21 de enero de
1793) fue
rey de Francia y de
Navarra y Copríncipe de Andorra, entre
1774 y
1789 , y
rey de los franceses entre
1789 y
1792, que ostentó el título de
duque de Berry. Fue arrestado durante la
insurrección del 10 de agosto de 1792, juzgado por la
Convención Nacional, declarado culpable de traición y condenado a la
guillotina el
21 de enero de
1793. Como irónico se puede destacar el hecho de que durante su coronación visitó el
Instituto Luis el Grande (Licée Louis-le-Grand), donde un joven, de 17 años, llamado
Maximilien Robespierre, leyó un discurso en latín para alabarlo.
Infancia y ascenso al trono
Nacido como Luis Augusto de Francia, duque de Berry, Luis XVI fue el tercer hijo de
Luis Fernando, Delfín de Francia y
María Josefina de Sajonia. La segunda esposa del Delfín era hija de
Federico Augusto III de Polonia,
rey de Polonia. Su padre murió joven y nunca llegó a reinar por lo que la descendencia pasó a Luis, que sucedió así a su abuelo
Luis XV. Su padre no se ocupó de su educación, la cual le fue confiada al
duque de la vauguyon La educación de Luis se centró más en las artes y las ciencias que en lo necesario para gobernar un país, debido en parte al duque de La Vauguyon y en parte a los intereses personales de Luis, el cual tenía gran interés por materias como la
geografia o la
historia. Luis demostró tener una gran capacidad para el estudio y una gran memoria. De hecho, fue el primer
rey francés en saber
inglés.
La Guerra de la Independencia
Tras la victoria de los independentistas norteamericanos sobre los británicos en la
batalla de Saratoga, Francia y España vieron una oportunidad para tomarse la revancha de la
Guerra de los Siete Años y su desastroso, para los franceses,
Tratado de París de 1763. Por ello, Luis apoyó firmemente a la
Revolución Americana. Esta medida iba, inicialmente, en contra de los intereses del país, que estaba en una difícil situación económica, ya que apoyar una guerra resultaría muy costoso. Las posibilidades de recuperar el esfuerzo económico de la guerra en una paz victoriosa se vieron frustrados con el
Tratado de Versalles de 1783 en el cual los franceses no consiguieron grandes aportaciones, aumentando así la deuda estatal. Necker dimitió en
1781 y fue sustituido por
Calonne y
Brienne, para ser restituido en
1788.
la Revolución
En
1789, la resistencia a la reforma económica llevó a Luis a convocar los
Estados Generales por primera vez desde
1614. Pretendía así conseguir aprobar las reformas económicas, dotando de mayor poder al
Tercer Estado, para hacer frente así a la oposición de la nobleza. Esta convocatoria fue uno de los acontecimientos que llevaron a convertir el malestar social en la
Revolución francesa, la cual comenzó en junio de 1789. El
Tercer Estado se autoproclamó
Asamblea Nacional. Los intentos de Luis de tomar el control de la Asamblea dieron lugar a reacciones antimonárquicas como el
Juramento del Juego de Pelota, la declaración de la
Asamblea Nacional Constituyente el
9 de julio y la
Toma de la Bastilla el
14 de julio. En octubre, la familia real fue trasladada del
Palacio de Versalles al
Palacio de las Tullerías.
Fin de su reinado
El 21 de junio de 1791, Luis intentó huir de París a la actual Bélgica (en aquellos días parte del Sacro Imperio Romano Germánico) con su familia. Sin embargo, fallos en la planificación de la huida causaron el suficiente retraso para que pudieran ser identificados y capturados en Varennes. Luis fue trasladado de vuelta a París, donde continuó como Rey constitucional, aunque bajo arresto domiciliario hasta 1792.
El 25 de julio de 1792, Carlos Guillermo Fernando, Duque de Brunswick, sobrino de Federico el Grande y comandante de las fuerzas prusianas, publicó un manifiesto (el llamado Manifiesto de Brunswick) que amenazaba a los parisinos con una venganza ejemplar si la familia real recibía algún daño, amenazando también con castigar cualquier tipo de oposición a los ejércitos prusianos o a la reinstauración forzada de la monarquía. El manifiesto fue considerado como la prueba definitiva de que existía una conspiración entre Luis y fuerzas extranjeras (en este caso Prusia) en contra de Francia. Luis fue arrestado oficialmente el 13 de agosto de 1792 y trasladado, junto a su familia, a la Torre del Temple (París). El 21 de septiembre de ese mismo año, la Asamblea Nacional declaró la República en Francia.
Ejecución
El proceso contra Luis comenzó el 1 de diciembre de 1792, bajo cargos de alta traición. Fue sentenciado a muerte en la guillotina el 21 de enero de 1793, por 361 votos a favor (uno de los cuales era de su primo Felipe Igualdad), 288 en contra y 72 abstenciones. Despojado de todos sus títulos por el gobierno republicano, el Ciudadano Luis Capeto, llamado así por los revolucionarios para quitarle su rango de rey, fue guillotinado frente a una multitud embravecida. A su muerte, su hijo de ocho años, Luis Carlos, se convirtió, para los monárquicos franceses y algunos estados extranjeros, en Luis XVII, rey de Francia de jure, a pesar de que Francia había sido declarada república.